Por PABLO MARTINEZ
Un candidato de la B ante un débil equipo de la C. Se suponía que el resultado debía ser el que se termino dando. Pero ojo, que el local jugó quince minutos inteligentes, pero sus propias limitaciones no pudieron aguantar el 1-0 a favor, dándole paso a la realidad.
El cotejo se inició con un gol tempranero de BANCARIO, a los doce minutos, un tiro libre desde tres cuartos de cancha, terminó cabeceando D. Ferreyra contra su propio arco, con el afán de despejar, le dió el 1-0 a los dueños de casa.
En ese primer cuarto de hora, ARGENTINO siempre estuvo incómodo, nunca pudo encontrar sus figuras para hacer circular la bocha y el team de Cisterna muy bien abroquelado atrás, desbarataba toda buena intención foránea.
Hasta que el entrenador albo, J. C. Benítez, salió del banco a pedir tranquilidad y los pibes hicieron caso.
La sensación en el ambiente, era que el conjunto de barrio Sarmiento era naturalmente más equipo que su rival, pero debió plasmarlo en el marcador, hasta que llegó la igualdad. Fue mediante un tiro libre desde el borde del área, que ejecutó G. Ortiz, con un poco de fortuna, porque la redonda pasó entre varios rechazos fallidos y termino metiéndose contra el palo izquierdo de N. Luchesi, era el 1-1.
Once minutos más tarde, apareció una de las figuras de la contienda, M. Benavidez, que se acercó a la puerta del área y sacó un estupendo remate (precisión y violencia), para dar vuelta la historia, era el 1-2.
Ya a esa altura del juego, el "tucu" W. Falkemberg, había dilapidado dos situaciones claras de conquista, que se le nego definitivamente en la tarde.
En la segunda parte, gol de vestuario, no habían pasado treinta segundos que la pelota habia vuelto a rodar, que E. Garín recibió un centro desde la zurda y con un disparo certero, con la colaboración de un defensor que desvió el recorrido de la pelota, para vencer la resistencia del guardavallas local, era el 1-3.
Después llegaría el show de goles del ingresado M. Medina, tuvo su hack trick y aseguró la chapa final. El cuarto fue a partir de una serie de rebotes, que el juvenil mando a la red, estaban 1-4.
Seis minutos más tarde, tiro de esquina desde la izquierda, notable testazo de Medina con el parietal derecho, era el 1-5.
Y otros seis minutos después, llegaría la tercera emoción de su cosecha personal, con una notable volea que superó al arquero, era el 1-6, victoria abrochada.
Para decorar el marcador, llegaría a los ´40, el segundo tanto de BANCARIO, tras un centro desde la derecha que S. Fernandez empujó a la red debajo del arco, era el 2-6 final.
Pitazo del juez Sergio Pepió, de intachable arbitraje (sin fallos polémicos, correcto en todas las interpretaciones reglamentarias), para una nueva victoria del albo, que se fue festejando rumbo al vestuario, donde un cántico estruendoso arengaba al plantel a ascender a la primera división.
Las figuras: en ARGENTINO, el criterio y despliegue futbolístico de Mauricio Benavídez, que merece ser considerado por la primera de A.F.A. El gran aporte de Germán Ortiz, que consiguió un gol que tranquilizó al equipo y siempre fue incisivo.
Por BANCARIO, se podría rescatar el trabajo colectivo de los primeros quince minutos del match y la incansable labor de Franco Paglia por derecha.
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